La tienda on-line es una página web destinada a tener una rentabilidad, a vender una serie de productos y obtener un beneficio a través de estas ventas. Así que no solo se trata de posicionar correctamente esta web, sino que además hay que potenciar la acción del cliente para que estas se conviertan en ventas, ofreciendo una página ágil y de fácil navegación.
Pero hay ocasiones en que el usuario, por algún motivo, deja incompleta una compra y por cualquier cuestión, no vuelve para cerrarla. Por este motivo hay que mantener activo un canal de comunicación con el cliente, para evitar que se quede pendiente el cierre de una venta.
Es importante tener constancia de los carros que continúan llenos, sin haber cerrado la compra. Es posible que el usuario desista de continuar la compra, aunque también es posible que se haya despistado. Un aviso de que el carro continúa lleno puede hacerle volver y terminar la compra.
Además, este aviso puede ir acompañado por una acción que le lleve a no solo completar la acción, sino también a adquirir más productos de la tienda on-line. Esta podría ser incorporar una tarjeta regalo por una cantidad atractiva o un descuento sobre la compra total. De esta manera, el cliente puede sentirse apreciado y podría tener más interés en adquirir más productos.
El pedido puede tener además repercusión en las redes sociales del cliente. Se le puede invitar a que comente que ha realizado una compra en la tienda on-line, de manera que la acción se convierte en social y puede ser vista como una acción realizada por él, a modo de recomendación.
Son pequeños alicientes que se pueden añadir a la tienda on-line, de manera que se hace más atractiva la compra en ella y es más sencillo realizarla. Lo mejor es ponerse en manos de un equipo de provesionales, de manera que puedan aconsejar al emprendedor y aplicar todas estas medidas para rentabilizar de manera más rápida la web.